¡Hola! Hoy vamos a hablar de un tema super importante para los que tienen diabetes: ¡el glucagón! Aunque la insulina se lleva casi toda la atención en el mundo de la diabetes, el glucagón también tiene mucha importancia y es una hormona clave para mantener los niveles de azúcar en sangre bajo control.
Así que, ¿qué te parece si exploramos juntos qué es el glucagón? ¿Para qué sirve exactamente? Y ¿Cómo se usan las inyecciones de glucagón que te pueden salvar la vida en caso de hipoglucemia severa? ¡Empecemos!
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Su misión es mantener nuestro azúcar en sangre en niveles estables, principalmente cuando bajan demasiado. ¿Cómo lo hace? Pues tiene un truco bajo la manga: transforma una sustancia almacenada en el hígado llamada glucógeno en glucosa, que luego pasa a nuestro torrente sanguíneo. Este proceso se llama la glucogenólisis.
Pero eso no es todo, el glucagón también puede generar glucosa a partir de otras fuentes que no son carbohidratos, como los aminoácidos y las grasas.
En cualquier caso, lo más interesante aquí es cómo el glucagón y la insulina trabajan juntos, aunque de maneras opuestas para equilibrar nuestros niveles de glucosa en sangre. Mientras la insulina se encarga de reducir los niveles de azúcar cuando están altos, el glucagón entra en acción cuando estos niveles están bajos, ayudando a subirlos. Son como un equipo dinámico que mantiene todo en equilibrio.
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Imagina: te has pasado con la insulina o no comiste suficientes carbohidratos, y de repente, tus niveles de azúcar se desploman. Aquí es donde entra el glucagón al rescate.
Las inyecciones de glucagón actúan muy rápido. Le dicen al hígado: "¡Hey, necesitamos azúcar, y rápido!" y el hígado libera la glucosa almacenada en la sangre. Esto es vital, especialmente si la persona en hipoglucemia está inconsciente o no consigue ni comer ni beber algo dulce para subir su nivel de azúcar.
Dentro encontrarás una jeringa con líquido (agua esterilizada) y un frasco de glucagón en polvo. Una vez que tu u otra persona inyecta el glucagón, en unos 15 minutos deberías empezar a sentirte mejor.
Pero ojo, después de superar el susto, todavía es crucial buscar atención médica con tu médico o ir a la sala de emergencias. La hipoglucemia grave no es un juego y puede poner en peligro tu vida.
También se recomienda que cualquier persona que pueda llegar a necesitar usar un kit de inyección de glucagón, como tus familiares o amigos, reciba instrucciones previas sobre cómo usarlo.
Por ejemplo, el BAQSIMI, un glucagón en polvo nasal de Eli Lilly and Co., se administra con un spray nasal. Nada de agujas, ¿qué te parece? También existe el Gvoke HypoPen de Xeris Pharmaceuticals. Es una pluma inyectable de glucagón premezclada y lista para usar. Adiós a la complicación de mezclar el polvo con la solución liquida.
Recuerda, la hipoglucemia puede ser muy grave. Siempre habla con tu médico antes de tomar decisiones sobre tu tratamiento de emergencia para la hipoglucemia. Ellos te darán el mejor consejo adaptado a tus necesidades específicas.
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Por lo tanto, si vives o viajas a lugares donde la temperatura exterior supera los 77 °F (25 °C), debes proteger tus inyecciones de glucagón del calor ambiental.
Por lo tanto, te doy algunos trucos y consejos para proteger tu kit de glucagón del calor durante los días calurosos de verano,
Así que, ¿qué te parece si exploramos juntos qué es el glucagón? ¿Para qué sirve exactamente? Y ¿Cómo se usan las inyecciones de glucagón que te pueden salvar la vida en caso de hipoglucemia severa? ¡Empecemos!
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¿Qué Es El Glucagón?
Si tienes diabetes, imagino que ya has oído hablar del glucagón alguna vez. Es una hormona que nuestro propio cuerpo produce naturalmente, específicamente en una parte del páncreas llamada islotes de Langerhans.Su misión es mantener nuestro azúcar en sangre en niveles estables, principalmente cuando bajan demasiado. ¿Cómo lo hace? Pues tiene un truco bajo la manga: transforma una sustancia almacenada en el hígado llamada glucógeno en glucosa, que luego pasa a nuestro torrente sanguíneo. Este proceso se llama la glucogenólisis.
Pero eso no es todo, el glucagón también puede generar glucosa a partir de otras fuentes que no son carbohidratos, como los aminoácidos y las grasas.
En cualquier caso, lo más interesante aquí es cómo el glucagón y la insulina trabajan juntos, aunque de maneras opuestas para equilibrar nuestros niveles de glucosa en sangre. Mientras la insulina se encarga de reducir los niveles de azúcar cuando están altos, el glucagón entra en acción cuando estos niveles están bajos, ayudando a subirlos. Son como un equipo dinámico que mantiene todo en equilibrio.
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¿Para qué sirve el glucagón inyectable?
Si tienes diabetes, especialmente tipo 1 tratado con insulina, es muy probable que tu médico te haya recetado un kit de inyección de glucagón. Es como un botón de emergencia para situaciones de hipoglucemia grave, es decir, cuando tu nivel de azúcar en sangre cae peligrosamente bajo.Imagina: te has pasado con la insulina o no comiste suficientes carbohidratos, y de repente, tus niveles de azúcar se desploman. Aquí es donde entra el glucagón al rescate.
Las inyecciones de glucagón actúan muy rápido. Le dicen al hígado: "¡Hey, necesitamos azúcar, y rápido!" y el hígado libera la glucosa almacenada en la sangre. Esto es vital, especialmente si la persona en hipoglucemia está inconsciente o no consigue ni comer ni beber algo dulce para subir su nivel de azúcar.
El kit de emergencia
El kit de glucagón de emergencia es bastante llamativo: viene en un estuche de color naranja para que sea fácil de encontrar en caso de emergencia. Si sueles sufrir episodios graves de hipoglucemia, este kit debería ser tu compañero constante.Dentro encontrarás una jeringa con líquido (agua esterilizada) y un frasco de glucagón en polvo. Una vez que tu u otra persona inyecta el glucagón, en unos 15 minutos deberías empezar a sentirte mejor.
Pero ojo, después de superar el susto, todavía es crucial buscar atención médica con tu médico o ir a la sala de emergencias. La hipoglucemia grave no es un juego y puede poner en peligro tu vida.
También se recomienda que cualquier persona que pueda llegar a necesitar usar un kit de inyección de glucagón, como tus familiares o amigos, reciba instrucciones previas sobre cómo usarlo.
Nuevas formas de glucagón en el horizonte
La medicina no se detiene y ahora empiezan a salir nuevas formas de glucagón síntetico que te pueden hacer la vida un poco más fácil que con el kit de inyección.Por ejemplo, el BAQSIMI, un glucagón en polvo nasal de Eli Lilly and Co., se administra con un spray nasal. Nada de agujas, ¿qué te parece? También existe el Gvoke HypoPen de Xeris Pharmaceuticals. Es una pluma inyectable de glucagón premezclada y lista para usar. Adiós a la complicación de mezclar el polvo con la solución liquida.
Recuerda, la hipoglucemia puede ser muy grave. Siempre habla con tu médico antes de tomar decisiones sobre tu tratamiento de emergencia para la hipoglucemia. Ellos te darán el mejor consejo adaptado a tus necesidades específicas.
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¿Cómo Aplicar el Glucagón?
Ahora, si todavía estas usando el kit de emergencia de Glucagón naranja, es cierto que inyectar el glucagón puede asustar, pero tranquilo, ¡es mucho más fácil de lo que piensas! Primero, vienes con instrucciones detalladas y muy claras, disponibles en la caja naranja para quién necesite inyectarte de manera urgente. Segundo, te recuerdo aquí cómo se aplica el glucagón inyectable en caso de hipoglucemia grave:- Evalúa la situación: Si ves a algún diabético con signos de hipoglucemia grave, como desmayos o convulsiones, y esa persona no puede tomar glucosa por boca, es momento de actuar y de administrarle glucagón de emergencia.
- Prepara el kit de glucagón de emergencia: Abre el kit de glucagón. Allí encontrarás un vial de glucagón en polvo y una jeringa llena con líquido.
- Mezcla con cuidado: Quita la tapa de la jeringa, inserta la aguja en el frasco de glucagón y empuja el líquido hacia adentro. Luego, agita el vial suavemente hasta que el polvo se disuelva completamente y la solución se vea clarita.
- Carga la jeringa: Con la aguja todavía en el vial, gira el conjunto y tira del émbolo para llenar la jeringa con la solución. Tienes que extraer toda la cantidad de glucagón que hay en el frasco.
- Inyecta el glucagón: Con firmeza y amor, inyecta el glucagón en un ángulo de 90 grados en la parte superior del brazo, el muslo o las nalgas de la persona. Presiona el émbolo hasta el final para que se inyecte todo el glucagón.
- Después de la inyección: Una vez hayas inyectado todo el glucagón, coloca a la persona de lado para prevenir cualquier riesgo de asfixia si vomita.
- Pide ayuda médica: Siempre, siempre llama a emergencias o busca ayuda de un médico después de administrar glucagón a una persona inconsciente, incluso si parece que esta mejor.
- Vigila cómo se siente: La persona debería empezar a mejorar en 10 a 15 minutos después de la inyección de glucagón. Si no es así, o si sigue mostrando síntomas de hipoglucemia grave, busca ayuda médica de inmediato.
¿Dónde inyectar el glucagón?
El glucagón se administra por vía subcutánea, como la insulina, es decir, en el tejido grasoso justo debajo de la piel). Los mejores sitios del cuerpo para inyectarlo son donde hay un poquito más de grasa, como la parte superior del brazo, el muslo o las nalgas. Estas áreas absorben bien el glucagón y hacen que el tratamiento sea más efectivo.Artículo relacionado: Sitios De Inyección De Insulina: ¿Dónde Inyectar Insulina?
Cómo Guardar El Glucagón Para Mantenerlo Seguro y Efectivo
Para asegurarse de quien mantengan su eficacia, los kits de glucagón inyectables deben guardarse en un lugar fresco y seco hasta que se necesiten. Aquí te dejo algunas instrucciones específicas para almacenar tus inyecciones de glucagón:- Controla la temperatura de almacenamiento. Siempre guarda el kit de glucagón a temperatura ambiente, idealmente entre 68 °F y 77 °F (20 °C y 25 °C). Es importante evitar temperaturas extremas. No congela el kit de glucagón y tampoco déjalo en lugares donde pueda estar expuesto a altas temperaturas.
- Consérvalo en su embalaje original. Mantén el kit de glucagón inyectable en su caja naranja original para protegerlo de la luz y la humedad hasta que necesites usarlo.
- Verifica la fecha de vencimiento. De vez en cuando, échale un ojo a la fecha de caducidad de tu kit de glucagón. Como no se usa mucho, puede ser que el tuyo lleve dos años en tu bolso y que se haya echado a perder. El glucagón caducado no funciona tan bien, así que asegúrese de reemplazar tu kit de glucagón antes de que llegue a su fecha de vencimiento.
- No lo guardes después de mezclar. Si tiene un kit de glucagón de los que requieren mezclar el polvo con una solución liquida, una vez que el polvo de glucagón se haya mezclado con el líquido, debe usarse inmediatamente y no puede guardarse para uso futuro.
- Tíralo de forma segura. Desecha de forma segura los kits de glucagón usados o caducados. Tu médico o farmacia local pueden guiarte sobre cómo desechar adecuadamente estos kits en contenedores para objetos punzantes.
- ¡Siempre ténlo accesible en todo momento! Guarda tu kit de glucagón en un lugar de fácil acceso en caso de una emergencia. Llévalo siempre contigo.
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Cómo guardar el glucagón frío cuando viajas
Como te lo decía antes, el kit de emergencia de glucagón inyectable debe guardarse a temperatura ambiente, idealmente entre 68 °F y 77 °F (20 °C y 25 °C). La exposición a temperaturas más altas puede afectar su eficacia.Por lo tanto, si vives o viajas a lugares donde la temperatura exterior supera los 77 °F (25 °C), debes proteger tus inyecciones de glucagón del calor ambiental.
Por lo tanto, te doy algunos trucos y consejos para proteger tu kit de glucagón del calor durante los días calurosos de verano,
- No lo dejes en la luz solar directa. Nunca dejes tu kit de glucagón expuesto a la luz solar directa. Incluso en días relativamente templados, la temperatura bajo la luz solar directa puede ser mucho más alta que la temperatura ambiente.
- No lo dejes en el auto. Evita dejar tu kit de glucagón en tu coche, ya que las temperaturas dentro de un vehículo estacionado pueden aumentar rápidamente manera impresionante, incluso si el auto está estacionado a la sombra.
- Usa una bolsa térmica para medicamentos. Si llevas el glucagón contigo en días de verano, transpórtalo en una bolsa térmica o un estuche enfriador para medicamentos, como los de 4AllFamily.
- Guárdalo dentro. Cuando no necesitas transportar tu kit de glucagón, guárdalo dentro de casa o en el hotel, en un lugar fresco y seco, alejado de la luz solar directa. Podría ser un armario, un cajón o una despensa, pero evita áreas como la cocina o el baño, que se calientan y tienen mucha humedad.
- Si viajas en avión, lleva tu kit de glucagón en tu equipaje de mano. ¡Nunca lo factures! Las temperaturas en la bodega de un avión pueden llegar a ser extremadamente frías o calientes.
